5 medidas que los CFO pueden tomar ya mismo para impulsar el crecimiento y la rentabilidad

En la actualidad, los directores financieros (CFO) tratan de enfrentarse a una economía plagada de contradicciones. El entorno político mundial sigue tensionado y casi todos los CFO (93 %) se están preparando para una leve recesión, según Deloitte, en un contexto de inflación global persistente y con los costes de explotación en aumento. Sin embargo, el desempleo en los 38 países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) se situó por debajo del 5 % en el primer semestre de 2023, con una cifra de 33 millones de personas desempleadas, cercana al mínimo jamás registrado, y una encuesta de ManpowerGroup puso de relieve que casi cuatro de cada cinco empresas de todo el mundo tienen dificultades para encontrar el talento que necesitan. La atracción y la retención del talento se convierten en el principal desafío del director financiero.

A pesar estar preparándose para afrontar la recesión, los responsables de finanzas encuestados por Deloitte a principios de 2023 se mostraron notablemente más optimistas en cuanto a la situación de la economía global a un año vista que solo unos pocos meses antes. Sea cual sea el adjetivo que elijas para describir esta situación —incierta, impredecible, extraña—, lo cierto es el entorno no resulta sencillo para la planificación y la inversión de las empresas.

Esta conjunción de eventos supone un hito decisivo para los CFO y las empresas que dirigen. La investigación de la consultora de gestión Bain & Company demuestra que, durante la recesión de 2008, muchas más empresas del índice S&P 500 incrementaron o redujeron los márgenes de explotación—ascendiendo hasta situarse en el percentil superior o descendiendo al inferior, que durante el periodo posterior, marcado por una mayor estabilidad. En otras palabras, las decisiones que toman los líderes durante las fases de ralentización económicas agrandan la brecha entre las empresas de mejor y peor rendimiento.

Todas estas circunstancias han provocado que los focos apunten a los CFO, y que sean estos quienes asuman el control. Los CFO y sus equipos actúan como custodios y a la vez son expertos en los datos a los que recurren los responsables de negocio para tomar decisiones. Dependen de la información financiera para decidir cómo asignar recursos y lograr ventajas que mejoren la rentabilidad sin obstaculizar el crecimiento. Ahora que el crecimiento a toda costa se ha convertido en un vago recuerdo, las partes interesadas, incluidos los CEO, los inversores y los empleados, confían en los líderes financieros para ayudar a que la organización simultáneamente identifique las inversiones que brinden rentabilidades a largo plazo y recorte los costos oportunos. Para ayudar a los equipos de los CFO en esta tarea tan exigente y visible, a continuación detallamos cinco estrategias y acciones específicas que los CFO pueden adoptar para ayudar a su organización a salir más fuerte de la incertidumbre actual.